De Sintra al fondo del oceano...08/12/17


Desde que decidimos volver a visitar Lisboa nos ha rondado por la cabeza la idea de "que puede haber cambiado en esta ciudad desde que nos fuimos...". Hoy esta idea no solo nos rondará la cabeza sino que se pegará a nosotros como una lapa durante nuestra visita a Sintra.

El día amenaza lluvia y tras encontrarnos con Carlos en la estación de Rossio cogemos el atestado tren que nos llevará a Sintra.

En 40 minutos llegamos a Sintra, salimos de la estación y una marea de "agentes" turísticos nos asalta cartel en mano intentando convencernos de que su tour guiado, su tuk-tuk o su propuesta para comer es la mejor e irrechazable propuesta que podamos haber oído en la vida... Es un hecho, las hordas turísticas han llegado a Sintra y ya intuimos que casi nada será como recordamos...

Caminamos atravesando el pueblo hacia la Quinta da Regaleira, un impresionante lugar del que guardamos un especial recuerdo...

Quinta da Regaleira.

La quinta fue la vivienda de Antonio Carvalho Monteiro, un millonario y filántropo, naturalista, escritor y empresario que plasmó en este lugar todo su imaginario fantástico y sorprendente.
Además de un impresionante palacio, una ermita, lago con cascada, invernadero y múltiples terrazas, a Carvalho Monteiro se le ocurrió conectar a través de túneles subterraneos muchos de estos lugares, a través de pozos y pasadizos secretos convirtió este lugar en el pasatiempo ideal de todo el visitante que acudiera a la Quinta... Todo decorado con la mas impresionante y abigarrada mezcla de estilos y simbología masónica, cristiano-templaria y también originaria de civilizaciones antiguas...

Entramos en la Quinta y comenzamos a hacer cola para poder acceder y caminar por las grutas, los pozos...

Si algo podremos rescatar de esta visita, es la "ambientación" que la meteorología nos ha preparado, una densa niebla y una ocasional lluvia vestirán a la Quinta con el traje que mejor le sienta...



Dragones y otros animales mitológicos adornan cada rincón...

Pozo iniciático.

Tras cada recodo, una gruta invita al visitante a adentrarse en sus cuevas secretas... ¿a donde nos llevarán?


Tratamos de "escabullirnos" de los grandes grupos de visitantes (tarea ardua donde las haya) para obtener las mejores imágenes y fotografías...

... y si hay que fotografiar tréboles, se fotografían tréboles...
... y si nos apetece fotografiar setas, fotografiamos setas...
Descendemos al pozo y cruzamos por las piedras de la laguna...


Retornamos al punto de inicio y para finalizar la visita, entramos en el palacio-residencia de Carvalho Monteiro...


En consonancia con el resto del lugar, el palacio está profusamente decorado y exhala riqueza y abolengo por los cuatro costados... 

Salimos de la Quinta y bajo una pertinaz lluvia (y el paraguas en el apartamento de Lisboa...) volvemos al centro de Sintra... Instamos a Carlos a visitar el Palacio da Pena pero si algo hemos aprendido nosotros de la visita a la Quinta es que ningún "nuevo" recuerdo podrá superar los que ya tenemos del lugar procedentes de 12 años atras...

Siguiente parada... el oceanario de Lisboa...

El de Lisboa es uno de los oceanarios mas importantes del mundo, guardamos un genial recuerdo de nuestra anterior visita... y en este caso jugamos sobre seguro a que el lugar no habrá cambiado y a que sin duda alguna nos volverá a encandilar...


¡Nos reencontramos con "Vasco"! la mascota del Oceanario... que como dice Soraya, atendiendo al tamaño de su cabeza, tiene que ser mi hermano secreto del que fuí separado al nacer...
Visitaremos en primer lugar la exposición temporal del paisajista submarino Takashi Amano, Amano ha construido un espectacular jardín submarino en el que es el acuario mas grande jamas construido,  90 personas y 3 meses de trabajo concluyeron en toda una experiencia para los sentidos...




Cruzamos el puente que nos llevará a la exposición permanente del acuario, El oceanario tiene un gigantesco depósito central alrededor del cual se ubican múltiples salas dedicadas a diferntes partes de los diferentes océanos... como un mapamundi del fondo del mar y como avezados viajeros que somos vamos recorriendo cada "país" y conociendo a sus habitantes...

Dragones de mar... 

...preciosas medusas...



Pero lo mas espectacular sin lugar a dudas es el tanque central, donde decenas y decenas de peces de diferentes especies nadan acompasadamente como si formasen parte de un bonito carrusel...



Finalizamos la visita con una profunda sensación de calma y tranquilidad... es lo que nos han transmitido todos estos seres con sus naturales "bailes"...

Solo queda finalizar otro sensacional día con una cena en un lugar especial... ¿nos acompañáis al Chapito?


Pero el Chapitó no es solo un restaurante,... o mejor dicho, lo que menos resulta ser es un restaurante, se trata de un centro cultural, escuela de circo, café teatro y quien sabe cuantas cosas mas... todo esto suspendido de una de las colinas que rodean el centro de Lisboa, es decir, con algunas de las mejores vistas de toda la ciudad...


La comida no resulta ser espectacular pero no está mal, finalizaremos la noche con una copa en la mano llena de algún "líquido digestivo" mientras escuchamos un concierto de samba...


Durante el regreso al apartamento, seguiremos viendo pintadas reivindicativas criticando la pérdida de identidad de la ciudad debida al descontrol del turismo...



Otro día completito... hemos estirado y aprovechado en cada minuto... misión cumplida...

Bihar arte!

Datos prácticos.

Como ir a Sintra:
Salen trenes de la estacion de tren de Oriente y Rossio. El tren tarda 40 minutos.
Para nosotros imperdibles en Sintra:
La Quinta de la Regaleira, el Palacio de la Pena y el Convento de los Capuchos al que solo se puede ir en coche o andando 8 km.
Oceanario. Un lugar para perderte mas de 2 horas. (18,00 euros)
Cenar en el Chapito. El sitio es muy bonito. Es un bar, terraza y restaurante en torno a una escuela de circo con unas vistas fantasticas...pero ha perdido mucha calidad en la comida, tiene una carta muy muy escasa y es muy caro. Yo iria a tomar algo a su bar que de vez en cuando tiene programados conciertos.

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